Merlin Castell: Los triunfos de un hondureño

Merlin Castell: Los triunfos de un hondureño
El diseñador originario de Sonaguera, Colón va al reality “The fashion show” de Bravo TV
17.04.09 - Actualizado: 18.04.09 12:06pm - Sabino Gámez. Redacción La Prensa: sabino.vega@laprensa.hn

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San Pedro Sula, Honduras

Da gusto saber de los triunfos de uno de los nuestros y más si es una persona a la que le hemos seguido la pista desde que se inició en el mundo de la moda internacional.

Famoso por su excéntrico estilo de vestir y diseñar, Merlin Castell, nacido en Sonaguera, Colón, y residente en Los Ángeles, es uno de los 15 diseñadores escogidos por la cadena norteamericana de televisión Bravo para el reality "The fashion show", una nueva versión de "Project Runway".

Este hondureño, bautizado por LA PRENSA como el "John Galliano latino" por su inconfundible estilo en pasarela, fue escogido por la famosa televisora para ser parte del grupo de modistas que protagonizarán la primera temporada del programa, cuyo estreno mundial es el 7 de mayo en el canal Bravo.

Merlin Castell es el primer hondureño afincado en EUA que participa en un reality show de tal magnitud. "Es un honor. Es una oportunidad que jamás me esperé porque trabajé con Janice Dickinson en su programa "Janice Dickinson Modeling Agency" que es muy visto y ahora, lograr esto es algo que me llena de orgullo porque nada es imposible en la vida", dijo en exclusiva a Vivir en Rosa en comunicación telefónica.

Cuento de hadas

Merlin fue un niño criado en Sonaguera, Colón. Desde muy chico le confeccionaba ropa a las muñecas de barro que su hermana le hacía. Nunca dejó de soñar y convertirse en alguien famoso y hoy, gracias a su tenacidad, lo está logrando.

Su nombre original es Merlin Castellón, tiene 38 años y es catalogado por muchos que lo conocen como un personaje exigente y perfeccionista con él mismo. Los fashionistas lo llaman "El mago de la moda" por su increíble capacidad para diseñar.

"Me encanta hacer cosas que estén bien hechas. Soy de los que si inician algo lo hacen bien, sino es mejor ni comenzarlo", recalca.

Castell además de ser un buen diseñador es un experto en el dibujo. En su niñez recuerda que le fascinaba dibujar castillos y mansiones en la tierra del patio de su casa en el pueblo de Isletas junto a su hermana Leyda, quien hoy es estilista.

Uno de los desafíos que tuvo que enfrentar en su vida fue dejar aquella calma de su hogar liderado por su madre y junto a sus seis hermanos emprendieron un nuevo rumbo en su vida tras el paso del huracán Fifí en el año de 1970. Se trasladaron a vivir a las sabanas de Isletas.

El tiempo pasó y con ello la mudanza volvió a la vida de la familia Castellón. Esta vez decidieron vivir en Tegucigalpa, ya que su madre estaba enferma y urgía de atención médica.

Cuando cumplió los nueve años, el dibujo se volvió más que un pasatiempo, una pasión.

"Yo pensaba que iba a ser caricaturista, pero siempre terminaba dibujando ropa con ideas que tomaba de programas que veía en televisión, como el Chavo del 8, de las telenovelas y del programa de Verónica Castro "Mala noche no", afirma con cierta nostalgia.

Fue en ese justo momento en que comenzó a diseñar prendas para él, que eran manufacturadas por una costurera amiga de su madre.

Retos y trabajo

Los ideales de aquel inquieto niño no se limitaron a diseñar sus propias prendas. Quería más y más. Es por ello que le pidió ayuda a su madre para ingresar a una escuela bilingüe para aprender inglés y además, recibir enseñanza sobre el idioma italiano.

Gracias al pequeño comedor que su progenitora poseía, esto fue posible hasta cierto tiempo. Los ingresos económicos de la familia Castellón no fueron suficientes y fue así como él tuvo que cambiar los "lujos de ese entonces" por la modesta educación que ofrecían las escuelas públicas.

Ya como adulto joven, Merlin no dejó desvanecer sus sueños y gracias a su pasión por el dibujo decide estudiar arquitectura. Fueron cuatro años de intensa preparación y en ese justo momento, su vida toma un giro distinto.

A la vida de Merlin llega el viaje a México que aprovechó no sólo para especializarse en la carrera que había decidido estudiar, sino buscar sus ideales en otro país.

Su meta de consagrarse como arquitecto quedó en un segundo plano, porque ya en México se enamoró aún más del diseño de modas, carrera que culminó con éxito en una institución de alta costura.

Con el tiempo viajó a Italia y aquellos estudios del idioma italiano le abrieron puertas fácilmente para seguir perfeccionando y aprendiendo las técnicas innovadoras en la Universidad Marangoni, una de las escuelas de diseño con mayor prestigio en Milán. Desde casi nueve años viajó a Los Ángeles, donde radica y está construyendo una carrera en el diseño de modas muy admirada por los fashionistas.

La colección más reciente de Castell llamada las superestrellas "galácticas" fue inspirada por la película "Barbarella" con el gusto extravagante y sabor del incomparable Juan Galliano.

Castell se define a sí mismo como camaleón, quien continúa reinventándose uno mismo cada nueva temporada. Debido a esto, las revistas y colegas lo han reconocido en el mundo competitivo de la moda.



Ocho son hombres y siete mujeres que tendrán que realizar diferentes desafíos en busca del mejor diseñador.